MEDITACIÓN EL MAR
MINDFULNESS NATURALEZA
Nos colocamos sentados con la espalda recta ocupando un espacio frente al mar.
Iniciamos la meditación inclinando levemente la cabeza hacia abajo, con una tenue sonrisa en los
labios y cerramos muy lentamente los ojos.
Comenzamos inspirando profundamente y expiramos prolongando la exhalación.
Con cada inhalación vamos absorbiendo el yodo y el oxígeno que nos proporciona esta brisa del
mar.
El aire penetra por las fosas nasales, recorre la garganta, laringe, esófago y purifica nuestros
pulmones, hinchando el abdomen.
Posteriormente lo dejamos salir con una respiración profunda entreabriendo los labios.
Sentimos cómo se van relajando los pómulos, boca, ojos, orejas, frente.
Seguimos con una respiración profunda, consciente y presente en este momento que vivimos.
Nos dejamos acunar por las olas que vienen y van, a la par que dejamos que nuestros pensamientos
se alejen con ellas.
Nuestro cuello, espalda, brazos y manos se van adormeciendo con el sol que nos roza e ilumina.
Ahora nuestras piernas y pies, nos sentimos como si estuviéramos flotando en el mar.
Escuchamos atentamente los sonidos que nos envuelven: las gaviotas, el mar al romper.....
Sólo existe este momento en el aquí y en el ahora.
Si llega cualquier pensamiento o preocupación a la mente volvemos al instante presente y lo
dejamos ir, soltamos todo lo que nos ata y nos impide ser.
Seguimos inspirando y exhalando con consciencia plena.
¿Cómo te sientes ahora?
¿Qué parte de tu cuerpo llama tu atención?
Disfruta de este instante plenamente y sigue inhalando y exhalando profundamente.
Ahora sentimos como gotitas de agua del mar nos salpican, refrescando la cara, cabello, pecho,
vientre.
Nos sentimos cada vez más libres, en paz, y muy despacio vamos moviendo los pies, los dedos de
las manos y comenzamos a abrir los ojos, los mantenemos un momento focalizados en ese mar en
calma, azul transparente.
Nos vamos levantando muy despacio y damos gracias por el instante vivido.
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